Nuestro día en Berlín fue una escala que nos salió de chiripa calzando vuelos batatos en nuestro viaje por Europa del este y que pensamos que estaría bien aprovecharla.
El día que llegamos a Berlín, habíamos desayunado en Riga, pasaríamos el día en Berlín (donde comimos) y por la noche volaríamos a Budapest, donde cenaríamos. No se puede tener un día más completo, un día así es la panacea del viajero, lo recomiendo cien por cien.
Cuando llegamos a Berlín hacia frió y nos llovió un poco, teníamos poco tiempo (unas 9 horas), así que, aunque la ciudad para conocerla en profundidad merece mucho más de un día, nosotros nos adaptamos a un itinerario rápido de un vistazo.
A simple vista no es una ciudad atractiva, es una ciudad muy histórica y se necesita mucho tiempo para conocerla, ya que
se trata de una ciudad que expone su historia documentada en museos y edificios.
A simple vista no es una ciudad atractiva, es una ciudad muy histórica y se necesita mucho tiempo para conocerla, ya que
se trata de una ciudad que expone su historia documentada en museos y edificios.
Berlín tiene dos aeropuertos y nosotros aterrizamos en el aeropuerto de Tejel, que es el que es el más cercano a la ciudad. El tranvía desde el aeropuerto nos dejó en los alrededores de la plaza de Breitscheidplatz, que es el centro neurálgico y muy concurrido de la ciudad.
En esa misma plaza donde nos dejó el tranvía, se encuentra la iglesia de Káiser Wilhelm Kirche, una iglesia muy peculiar ya que le falta parte de su torre porque fue bombardeada durante la segunda guerra mundial y en vez de derruirla por completo, se quiso que permaneciese así en recuerdo y honor a las víctimas de la barbarie. También hay un monumento conmemorativo a las víctimas que se alza desde el suelo.
Desde allí caminaríamos por la antigua Berlín del oeste hasta el centro histórico disfrutando de una de las avenidas más amplias y largas que tiene la ciudad, la avenida del 17 de Junio, que nos llevó hasta la misma puerta de Brandenburgo.
La puerta de Brandeburgo era el símbolo del antiguo Berlín recuperado tras la caída del muro. A ambos lados de esta puerta se extendía el ya caído muro de Berlín. Esta puerta triunfal es una grandiosa construcción clásica. Las estatuas de la puerta se llaman la cuadriga de la victoria y está hecha de cobre. La puerta ha sido testigo de toda la historia que le ha rodeado al país y a la ciudad hasta el año 1989 que cayó el muro.
En esa misma plaza donde nos dejó el tranvía, se encuentra la iglesia de Káiser Wilhelm Kirche, una iglesia muy peculiar ya que le falta parte de su torre porque fue bombardeada durante la segunda guerra mundial y en vez de derruirla por completo, se quiso que permaneciese así en recuerdo y honor a las víctimas de la barbarie. También hay un monumento conmemorativo a las víctimas que se alza desde el suelo.
Iglesia Kaiser Wilheim en Berlin |
Desde allí caminaríamos por la antigua Berlín del oeste hasta el centro histórico disfrutando de una de las avenidas más amplias y largas que tiene la ciudad, la avenida del 17 de Junio, que nos llevó hasta la misma puerta de Brandenburgo.
La puerta de Brandeburgo era el símbolo del antiguo Berlín recuperado tras la caída del muro. A ambos lados de esta puerta se extendía el ya caído muro de Berlín. Esta puerta triunfal es una grandiosa construcción clásica. Las estatuas de la puerta se llaman la cuadriga de la victoria y está hecha de cobre. La puerta ha sido testigo de toda la historia que le ha rodeado al país y a la ciudad hasta el año 1989 que cayó el muro.
Avenida con Puerta de Branderburgo al fondo en Berlin |
Puerta de Branderburgo en Berlin |
Puerto de Branderburgo en Berlin |
La puerta de Brandeburgo está abierta a la plaza Pariser totalmente reconstruida de lo que fue en su tiempo el centro mundano y elegante del Berlín prebélico. Justo durante nuestra visita la puerta de Brandemburgo estaba vallada por el evento del aniversario de los veinte años de caída del muro por lo que la plaza no se podía contemplar muy bien.
Continuando nuestra visita llegamos a la Plaza de Alexander, una plaza abierta con buenas vistas de la torre de Berlín. Allí se encuentra el bonito Ayuntamiento de Berlín con su color de piedra rojiza. En el centro de la plaza se impone la fuente de Neptuno frente a la iglesia de Santa María.
La torre de Berlín, uno de los edificios más llamativos de la ciudad, fue construida en los años sesenta, mide 310 metros de altura y es la torre de la televisión alemana. Para no ser una construcción relativamente nueva, me parece que tiene un aspecto muy futurista. Los lugareños le llaman teleesparrago
La torre de Berlín, uno de los edificios más llamativos de la ciudad, fue construida en los años sesenta, mide 310 metros de altura y es la torre de la televisión alemana. Para no ser una construcción relativamente nueva, me parece que tiene un aspecto muy futurista. Los lugareños le llaman teleesparrago
Paseando por Berlin Plaza |
Plaza Alexander Ayuntamiento Berlin |
Torre de Berlin |
Friedrichstrasse es la calle principal de Berlín llena de vida y comercio. Esta famosa calle estuvo partida en dos por el muro de Berlín.
Uno de los edificios que más llama la atención paseando por las calles de la ciudad es sin duda la Berliner Dom. Se trata de una imponente construcción del neobarroco. La verdad es que impresiona aunque el gran parque donde está ubicada disimula sus extensiones pero es grandísima.
La Catedral Santa Eduviges se exhibe a los pies del río y es una magnifica muestra del neoclásico alemán. Es una catedral católica y tiene una ligera imitación al panteón de Roma.
Uno de los edificios que más llama la atención paseando por las calles de la ciudad es sin duda la Berliner Dom. Se trata de una imponente construcción del neobarroco. La verdad es que impresiona aunque el gran parque donde está ubicada disimula sus extensiones pero es grandísima.
La Catedral Santa Eduviges se exhibe a los pies del río y es una magnifica muestra del neoclásico alemán. Es una catedral católica y tiene una ligera imitación al panteón de Roma.
Berliner Dom en Berlin y rio |
En general los edificios de la ciudad de Berlín son de color gris y dan la sensación de tristeza, te trasladan a ese oscuro pasado que tuvo la ciudad. En contrapartida a esto, existe otra parte de la ciudad como una gran urbe moderna y cosmopolita. La ciudad en sí, como ya he comentado antes, es para descubrirla históricamente, con más detenimiento entrando en sus museos y edificios, pero lo que es la ciudad en sí, no me pareció bonita.
Una cosa que me sienta muy mal de las ciudades turísticas alemanas, es que cuando me tomo la molestia de hablar en alemán, la respuesta me viene en inglés, ya me ha pasado en otras ciudades de habla alemana y muy turísticas, como Viena, por lo tanto me cabreé y dije que no me esforzaba más en hablar alemán.
Sígueme en redes
la puerta de Brandemburgo... me gustaría visitarla
ResponderEliminarPues ya sabes Hector, vete pidiendo el viaje a tus padres. Saludos!
Eliminar