BUKIT LAWANG: RESERVA ORANGUTANES EN SUMATRA

Llegamos al puerto de Medan (Belawan) en barco desde Georgetown en Malasia. Durante el trayecto nos cansamos de ver varias películas de Bollywood que sin embargo tenían mucha aceptación en el barco.
Nos disponíamos a coger un bus a la capital, para después ir a la estación de autobuses destino Buki Lawang, pero al subir nos intentaron engañar con el precio, así que nos bajamos y allí nos encontramos con unos chicos ingleses y una chica polaca que habían contratado un viaje en taxi compartido a Buki Lawang, donde nosotros queríamos ir, así que, pagando nuestra parte, nos unimos a ellos.

Cosntrucciones Tipicas en Bukit Lawang Sumatra

Buki Lawang es la reserva de orangutanes más famosa de Sumatra y de las mejores de Indonesia. Nada más partir en la furgoneta se nota la extrema diferencia de Sumatra con sus países vecinos como Malasia y Singapur que están a años luz en desarrollo.

En indonesia todo es mucho más aventura, nada está previsto. Atrás quedan los rascacielos y el desarrollo asiático, Indonesia es otro mundo, sin embargo mi sensación fue buena y pensé que aquí teníamos que haber llegado antes, ya que sólo contábamos con una semana de estancia en la isla. La conducción era un caos, en la furgoneta a Buki, el copiloto iba sujetando una de las puertas delanteras que no cerraba bien. Empezó a llover torrencialmente y empezó a colarse agua por lo agujeros de la furgoneta que los íbamos tapando nosotros mismos haciendo turnos. Tanto llovía que el agua entraba por debajo de las puertas y nos calaba los pies. Íbamos conduciendo por plenos ríos de agua, pero para ellos era tan normal… yo hubo un momento que me asusté y pensaba que la furgoneta iba a salir flotando y después todos nosotros…

Después de varias horas y un dolor de cuerpo horrible llegamos al pueblo de Buki Lawang. Llovía torrencialmente y para llegar a nuestro hostel había que pasar un puente encima de un rio caudaloso muy alto tipo Indiana Jones. Nos preparamos para pasar el puente con los chubasqueros y de poco nos sirvieron, llegamos todo calados, era de noche y no había ningún tipo de iluminación. Según pasaba el puente miraba para abajo por la lluvia y sólo veía el pedazo de rio que estaba a escasos centímetros del puentecillo sujetado por unos endebles cables. Por cierto, al día siguiente nos dimos cuenta que en la entrada del puente ponía que no podían pasar más de seis personas a la vez.

Puentecillo en Bukit Lawang Sumatra

Llegamos al hospedaje, nos duchamos, nos cambiamos y cenamos. Todo era muy barato, era un hotel sencillo y muy barato. Nuestra cama tenía mosquitera y la habitación tenía un balcón.

Allí los turistas eran mayoritariamente nacionales y estoy segura que a los nativos les cobraban mucho menos que nosotros, y eso que para nosotros era barato, ya que pagamos como cuatro euros la noche la habitación doble con baño.

Alojamiento en Bukit Lawang Sumatra

Varios guías nos quisieron vender tours para ver a los orangutanes haciendo camping, pero eran carísimos, y tampoco queríamos algo especializado, así que descubrimos que se podía entrar en el parque a la hora que les llevaban la comida a los orangutanes y nos quedamos con esa opción más simple.

Buki Lawang es en realidad el nombre del pueblo y de la reserva de orangutanes. La reserva es en realidad un centro de rehabilitación de orangutanes.

Al día siguiente fuimos al parque, no sabíamos a ciencia cierta si podríamos pasar al parque, ya que el parque está en la otra orilla del rio y cuando hay mucho caudal las barcas no pasan, pero ese día menos mal que el rio estaba apto para pasar, pese a que la noche anterior había llovido torrencialmente.

Para pasar a la otra orilla del rio fue otra aventura, ya que hay que pasar en canoa con los mismos guardias del parque. La canoa parecía que se volcaba de un momento a otro.

Pasando a la reserva de Orangutanes Buki Lawang en Sumatra

Hay dos sesiones de alimentación de cada día (8 am y 3 pm) abierto al público donde se tiene una buena posibilidad de que el ver a algunos a los orangutanes que han sido liberados al medio natural.

Fuimos donde estaban los orangutanes y como los cuidadores les llevaban comida enseguida se acercaron y los pudimos ver muy de cerca.
Los orangutanes son muy curiosos y coquetos y se ponían a hacer cosas para llamar la atención, se nota que están muy acostumbrados a la gente. No teníamos permitido sacar fotos, ya que solo habíamos pagado la entrada sin opción, porque la entrada con foto era carísima, así que sacamos alguna foto de extranjis con la cámara pequeña y nadie nos vio.

Reserva de Orangutanes Buki Lawang en Sumatra

Reserva de orangutanes Buki Lawang en Sumatra

Reserva de orangutanes en Buki Lawang Sumatra

Terminada nuestra experiencia con los Orangutanes, decidimos pasar el resto de días saboreando Buki Lawang el pueblo. Esta pueblito es un lugar fantástico en medio de la selva con todo tipo de animales que se acercaban a los alrededor del humano a curiosear. Había muchos monos y aprovechaban alguna distracción humana para quitar comida, los monos estaban por allí saltando en medio de la gente.

Por las tardes nos bañamos en el rio Wampu, todas los lugareños en cuanto nos veían, venían hacia nosotros y nos preguntaban si se podía hacer fotos con nosotros. Donde nos bañamos al lado había una familia grandísima que estaban pasando vacaciones. Nos relacionamos con ellos y estuvimos toda la tarde con ellos, ellos encantados, nos invitaron a comer unos dulces típicos hechos por ellos mismos, algunas chicas hablaban un poquito de inglés.

Vista de Bukir Lawang en Sumatra

Rio Buki Lawang en Sumatra

Bukit Lawang Sumatra

Rio Bukit Lawang Sumatra

En el pueblo de Buki Lawang todas las casitas son pequeñas y humildes, los hoteles respetan las construcciones originales, nada de hotelazos ni turismo masivo, todo es muy rural y básico, las construcciones básicas tienen el techo de paja y son tejados redondos.
Los días que estuvimos allí fueron una delicia, paseando por la selva interactuando con locales y bañándonos en el rio. Yo por supuesto me bañaba vestida. Como estábamos en época de supuestas lluvias, todas las tardes llovía fuerte. El restaurante del hotel tenía una terracita al lado del rio y allí comíamos siempre, me puse morada a jugos naturales que estaban súper baratos.

Me dio pena dejar este sitio, me hubiese quedado más tiempo, pero había que ir al Lago Toba

FOTOS DE BUKI LAWANG SUMATRA

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