Ir al contenido principal

FRANKFURT: MANHATTAN DE EUROPA

Viajar a Frankfurt, también llamada la Manhattan de Europa, fue un viaje muy esperado ya que pasé parte de mi infancia viviendo en Alemania, concretamente en la ciudad de Offenbach, (muy cerquita de Frankfurt) y quería volver por esas ciudades que tantos recuerdos me traían de pequeña.
Llegamos al aeropuerto de Frankfurt Hahn con Ryanair, que está bastante lejos de la ciudad y no muy bien comunicado, ya que tuvimos que esperar un buen tiempo hasta que salió un bus con destino a la estación central de Frankfurt. 

Plaza der Rome en Frankfurt

En Frankfurt nos encontramos con una amiga con la que estariamos dia y noche  pateando la ciudad.

La ciudad ha cambiado mucho desde la última vez que estuve que fue en mi adolescencia. Por esos años ya empezaban a construir rascacielos y ahora ya están todos más que consolidados. Mirando al skyline de la ciudad, recordaba algún edificio que estaba en construcción cuando yo era adolescente.
Frankfurt es una ciudad muy manejable y se ve en poco tiempo. Había turistas, pero no es una ciudad de turistas masivos, de hecho, se puede preguntar en alemán sin que la contestación te vuelva en inglés.

Paseamos por la plaza Romerberg, la preciosa plaza que es el centro de la poca ciudad vieja que tiene la ciudad. Esta plaza está reconstruida después de la II guerra mundial, como la mayoría de los sitios de Alemania. La plaza está compuesta por varias casitas típicas alemanas destacando su edificio del Ayuntamiento y la iglesia de san Nicolás. Es la típica plaza donde se celebran los míticos mercadillos navideños. De esta plaza sí que me acordaba haber estado de pequeña.


Plaza del Rome en Frankfurt

Plaza der Rome en Frankfurt
Plaza der Rome en Frankfurt

Otro sitio mítico de la ciudad es la opera vieja situada en la plaza Opernplatz y que es un edifico precioso del que tengo muchos recuerdos de la infancia. En la fuente que está enfrente de la opera, cuando hacía calor la gente se sentaba en el borde, se sacaba los zapatos y metían los pies en el agua, no sé si hoy en día se sigue realizando esta práctica que cuando yo era pequeña era muy común, yo desde luego ahora en este viaje no vi a nadie hacerlo, y eso que hacía calor.


Plaza de la Opera Frankfurt

También paseamos por la plaza Hauptwache, con su edificio peculiar que lleva su mismo nombre y la Paulsplatz con su iglesia de San Pablo que también se utilizó como sede del parlamento. Ambas plazas están cerca de la plaza principal. La iglesia de San Pablo que siempre he pensado que tiene una forma ovalada muy característica, me recuerda un poco a un barco.
La iglesia que más me gusta de la ciudad es por supuesto la catedral de San Bartolomé, una preciosidad de catedral que sucede a la original del S.IX y reconstruida después de la guerra. La forma de la catedral tipo torre es muy curiosa, llama la atención también el color de la piedra con la que se construyó.

Catedral en Frankfurt

Interior catedral en Frankfurt

Por dentro es preciosa y más grande de lo que realmente parece que es, tiene tres naves tipo salón y en el coro se puede apreciar una sillería de mediados del siglo XIV. De esta catedral sí que me acordaba bien ya que tengo muchas fotos de pequeña.

Paseando por la calle de compras peatonal más importante de la ciudad hay un centro comercial que enseguida llama la atención por su peculiar arquitectura. Desde allí se puede subir a una terraza donde hay muy buenas vistas a la ciudad financiera y  se ven unas excelentes vistas de la torre  del Commerzbank.

Torre Commerzbank Frankfurt

Paseamos por las orillas del rio Main y tomamos muchas fotos de la espectacular vista de Mainhathan. A Frankfurt le llaman la Main-Hattan de Europa por la combinación de sus rascacielos y el rio Main...creo que es una denominación muy original y acertada.

Desde el rio mirando hacia la otra orilla se puede divisar famosa torre Europa o Europaturm y la torre la Heineken, ambas torres a las que subí de pequeña y aún conservo las fotos desde la terraza. La famosa torre Europa cuenta con una altura total de 337,5 metros y es símbolo de ciudad y es muy parecida al pirulí de Madrid, sólo que aquí los lugareños le llaman esparrago. 

Vista de Mainhathan en Frankfurt

Torre Heineken en Frankfrut

Cruzando el rio paseamos por el mítico barrio de Sachsenhausen. Es un barrio idílico formado por casitas de entramado de vigas de madera que albergan los locales tipo donde sirven vino de manzana. Hasta el siglo XIX el barrio fue habitado por pescadores, curtidores y vinicultores, curiosamente se salvó de los bombardeos de la guerra y es uno de los pocos barrios antiguos que se conservan en la ciudad. Sachsenhausen es comúnmente conocido por ser zona de restaurantes y bares nocturnos donde transcurre parte de la vida nocturna de esta ciudad.

Comentarios

  1. que bonitas son las casas de la plaza

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Aunque reconstruidas, la verdad es que las casitas de la plaza del Rome tienen mucho encanto. Gracias por comentar, Hector!

      Eliminar

Publicar un comentario