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COPENAGUE EN UN DIA

Desde Flensburg en Alemania decidimos viajar por un día hasta la capital danesa; Copenague. El viaje en tren desde la frontera fue muy caro y accidentado. Pagamos como casi unos cien euros por un billete a Copenhague de ida y vuelta, y es que pasar desde el Jutland a la isla donde se encuentra la capital es muy caro de cualquier manera que se haga.
Hicimos bien en aprovechar a visitar la ciudad, ya que sólo estábamos a unos doscientos kilómetros de distancia de la capital.

La estatua de la Sirenita en Copenague

El viaje en tren fue accidentado porque tuvimos un retraso largo y perdimos la conexión de tren entonces nos metieron en otro y no había asientos para todos, tuvimos que ir de pie y parecía realmente que estábamos en el tercer mundo. Yo me quejé a la revisora (que no sabía inglés) porque no podía tolerar que después de pagar casi cien euros íbamos a estar gran parte del viaje de pie. Una chica joven del vagón nos ayudó a traducir y nos comentó que iban a añadir más vagones. Al final llegando a otra ciudad añadieron varios vagones y pudimos sentarnos.


El viaje en tren hasta la capital es muy interesante. Todo el paisaje está muy verde y se pasan infinidad de puentes, ya que esa parte del país son todo islitas, en el paisaje predominan las vacas y las casitas.
Al llegar con retraso, tuvimos que darnos prisa para visitar todos los atractivos de la ciudad en un día.

Lo primero que se pasa desde la estación central de trenes hasta el casco histórico es por la plaza del Ayuntamiento del siglo XIX donde este edificio enseguida nos llama la atención. Pasamos de largo el Tivoli, los jardines ubicados en el corazón de Copenhague que representan una de las principales atracciones de la ciudad.


Plaza del ayuntamiento en Copenague

Para asegurarnos bien de que veíamos lo principal, nos dirigimos primero a las dos principales atracciones de la ciudad: el puerto antiguo y la Sirenita.

Nyhavn son unos pequeños puertos en fiordos construidos en el SXVII en el distrito de los canales y de ocio en Copenhague. Este histórico lugar está bordeado por casas de colores brillantes que hoy en día en su mayoría son bares, cafeterías y restaurantes.


Antiguo puerto en Copenague

Este pequeño puerto fue excavado por los prisioneros de guerra suecos de la Guerra y se trata de una puerta de entrada desde el mar hasta el antiguo centro de la ciudad en Kongens Nytorv (Plaza del Rey) donde los barcos descargaban la carga. La zona también se conocía por la cerveza, los marineros, y la prostitución.
Actualmente el lado norte de Nyhavn (números impares) está bordeada por casas de vivos colores construidas con madera, ladrillos y yeso. La casa más antigua data de 1661.

El lado sur de Nyhavn (números pares) cuenta con lujosas mansiones que bordean el canal, sobre todo Charlottenborg Palace en la esquina de Kongens Nytorv. El canal cuenta con muchos barcos de madera históricos que le dan ambiente al pequeño puerto. Paseando por allí no nos cansamos de contemplar las famosas casitas tan famosas e hicimos muchas fotos que después convertiríamos en panorámicas.


Antiguo puerto en Copenague

La otra gran atracción de la ciudad visitado a diario por decenas de personas es la estatua de La Sirenita, también conocida como Den Lille Havfrue. Se trata de una pequeña estructura de bronce con 1,65 metros de altura y 175 kilos, que representa al personaje de Hans Christian Andersen y constituye uno de los emblemas de la ciudad.

La estatua es pequeña, (aunque ya iba avisada de eso) pero aun así no pensaba que iba a ser tanto. Esta estatua fue creada en 1913 por el escultor Edvard Eriksen.
Hoy la sirenita es uno de los monumentos más importantes de la ciudad. Como había tanto turista alrededor había que esperar el turno para hacerse la foto con ella.


La Sirenita en Copenague

Visto lo más representativo de la ciudad nos fuimos a relajar al casco histórico de la ciudad de Copenhague, un barrio muy concurrido de locales y turistas porque en él se mezclan los edificios históricos con las calles peatonales y comerciales de la ciudad. Stroget denominan a las cinco calles principales de este casco histórico, siendo esta zona de las más concurridas de la ciudad.
Destaca su plaza Amagertorv, una bonita plaza donde cerca se encuentran dos de las iglesias más importantes de la ciudad la iglesia Helligaandskirken‎ (Holy Ghost Church), el único edificio que se conserva de la época medieval y la iglesia de San Nicolás (Skt. Nicolaj Kirke).


Casco histórico de Copenague

Casco historico de Copenague

Por todo el casco histórico y alrededores se encuentran otras muchas interesantes iglesias y plazas que se extienden por todo el centro de la ciudad por el que estuvimos caminando todo el día sin descanso.
Llama la atencion la Catedral de San Oscar, la catedral católica de Copenhague, el principal templo de todos los católicos de Dinamarca.  Es un templo neoclásico  concluido en 1842. Es un edificio construido con ladrillo rojo y no muy atractivo, pero la gran iglesia de San Federico le quita el protagonismo.

Iglesia de San Federico en Copenague


Otra de las construcciones que llaman la atencion es el nuevo edificio de la Ópera nueva de Copenhague considerado uno de los teatros más modernos del mundo. Se encuentra también entre las óperas más costosas del planeta con un precio de construcción superior a los 500 millones de dólares.
La verdad es que el edificio llama mucho la atención y es gran contraste con la idea clásica que tenemos de la Opera.
El antiguo teatro que ha quedado reservado para obras del barroco y conciertos.

Nueva Opera en Copenague

Antigua Opera en Copenague

Si hay algo de los que puede presumir la ciudad es de sus palacios. Después de patear todo el casco histórico hicimos la ruta de los palacios.
El Palacio de Rosenborg está ubicado en el centro de Copenhague y por su arquitectura e historia representa uno de los lugares más visitados de la ciudad. 

El edificio fue conformado con un estilo holandés renacentista, sobresaliendo sus altas torres, la mampostería de piedra arsénica de color rojo y sus amplios jardines que son los más antiguos de Dinamarca. El Palacio de Rosenborg fue utilizado como residencia de los monarcas hasta el año 1710. Después se utilizaría para otros fines hasta hoy en día abierto a visitantes.

Complejo de palacios en Copenague

Palacio Rosenborg en Copenague

Otro de los palacios de la ciudad es el Palacio Real Amalienborg, construido en el S.XVIII y la actual residencia de invierno de la familia real en Copenhague. Este palacio es considerado como una de las mejores piezas de la arquitectura danesa.
Se trata de un complejo compuesto por cuatro mansiones de estilo rococó que está ubicado de forma octogonal sobre la Plaza Amalienborg. Cada uno de sus edificios se orienta hacia el centro, en el que se erige la estatua del fundador, el rey Federico V. El edifico impresiona por lo enorme que es.

Siguiendo la ruta de palacios nos encontramos con el palacio Cristiansborg del siglo XV y con mezcla de estilos desde neoclasico al barroco.


Palacio Cristianborg en Copenague

Al final, aunque un poco apurados pudimos visitar lo principal de la ciudad, me encantó la ciudad y volvimos en tren esta vez sin percances a Flensburg.
En Flensburg, puse una queja en la Renfe alemana, por lo que nos había pasado con el tren, se lo iba explicando a un funcionario alemán, fue muy gracioso porque mantuvimos una larga conversación yo le hablaba en inglés que para mí era más fácil y él me contestaba en alemán, que le entendía bien. Quedaron en escribirme para darme la resolución a mi queja, pero nunca me llegó nada.

Después de pasar el día en Copenague, volvimos al Jutland

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