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PEKIN: ULTIMA PARADA DEL TRANSIBERIANO

Llegamos en tren a Pekin (nuestra ultima parada del transiberiano), un mes después de salir desde San Petersburgo a bordo del transiberiano. La última parada anterior había sido la ciudad de Jining en China, donde habíamos cambiado de tren. Sin duda, una foto emocionante para el recuerdo: el de la fachada de la estación de tren en Pekín. Para llegar a nuestro hotel teníamos que coger un taxi, porque aunque teníamos la dirección escrita en chino, no éramos capaces de llegar en transporte público.

Estación de tren de Pekin

Los taxis oficiales nos pedían muchísimo dinero, por lo que pactamos con un particular, creo que fueron unos cinco euros.
Nuestro hotel estaba en un hutong, un barrio tradicional chino de calles muy estrechas y de difícil acceso para los coches, así que cuando llegamos a la entrada de un callejón, el taxista nos paró ahí y empieza a negociar con uno de un rickshaw. Por señas le entendemos que él no puede dejarnos en la puerta del hotel, que tenemos que ir en rickshaw y pagar más, lo cual nos negamos, el hombre insiste y le decimos que no, que el precio pactado inicialmente es el que pagamos hasta la puerta de hotel. Empezamos a llamar mentiroso al taxista y timador, un montón de chinos se acercaron a ver la escena y nos hicieron corro, los chinos se partían de la risa en aquella incomoda situación. Cuando nos cabreamos el taxista se cagó y ya nos dijo que nos llevaba el de la bici por el precio acordado, pero no nos fiábamos así que al final cogimos nuestra mochila, salimos corriendo y no le pagamos ni un duro al taxista.
Yo al principio iba cagada pensando en que iba a llamar a la policía, pero mi marido iba tan chulo. En toda nuestra estancia en el país después, y dado la similitud física que tienen los chinos para nosotros, nos parecía estar viendo constantemente al taxista por todos los sitios.

Barrio tradicional en Pekin

En nuestro hotel, sólo había una persona John, el encargado, que hablaba inglés. Cuando él no estaba y necesitábamos preguntar algo en la recepción, sus compañeros tenían que llamarle por teléfono para que les tradujese.
La ciudad Pekín da para una visita de varios días. Es una ciudad enorme en la que lo ideal es moverse en metro y en Taxi. El metro de Pekín no es complicado y las estaciones están señalizadas en inglés.

La Plaza de Tiananmen es la plaza más importante de toda China, además de la más grande que existe en el mundo. Construida en 1949 tras la proclamación de la República Popular de China, la plaza cuenta con unas dimensiones colosales.
A lo largo de los años la plaza ha sido escenario de diferentes acontecimientos históricos entre los que destacan las Protestas de 1989, que terminaron con la muerte de cientos de manifestantes y la declaración de la Ley Marcial en Pekín.
El edificio más importante de la plaza y del que ésta toma su nombre es la Puerta de Tiananmen, ubicada al norte de la plaza y que da acceso a la ciudad prohibida. Desde esta puerta, conocida como La Puerta de la Paz Celestial, Mao Zedong proclamó la fundación de la República Popular de China en 1949.

El centro de la Plaza de Tiananmen se encuentra ocupado por el Mausoleo de Mao Zedong, el edificio en el que yace el cuerpo embalsamado del líder comunista, fundador de la República Popular China. 

Plaza Tiananmen en Pekin

Maosoleo Mao Zedong en plaza Tiananmen Pekin

La Torre del Tambor y la Torre de la Campana situadas también en el plaza, son dos emblemáticos edificios que marcaron el ritmo de vida del antiguo Pekín.
Además de ser importantes instrumentos musicales en la antigua China, el tambor y la campana han constituido una parte importante de la historia del pueblo chino indicando el paso del tiempo desde tiempos inmemoriales como avisar al amanecer y al anochecer, vamos una especie de de “cacho” (como se llama en Centro América) pero más antiguo.

Torre del tambor y Torre de la Campana en Pekin

En la plaza de Tiananmen por la noche vuelan cometas, hay muchísimas cometas volando en la plaza y es precioso, nos compramos una cometa para volarla y mi marido corriendo con ella perdió sus gafas de sol.

La Ciudad Prohibida es el lugar más importante y visitado de Pekín, especialmente para los ciudadanos y turistas chinos, que acuden desde todas parte de China para visitarla. Se le conoce como la Ciudad Prohibida porque el palacio y sus dependencias estuvieron reservados para la corte y sus súbditos desde su construcción en el año 1420, hasta 1949.

La Ciudad Prohibida es un majestuoso complejo arquitectónico desde el cual gobernaron los 24 emperadores chinos que se sucedieron durante más de de 500 años desde principios del siglo XV. El complejo alberga 980 edificios y ocupa 720 000 m²con 980 edificios con 9999 estancias. La Ciudad Prohibida está rodeada por una muralla de 7,9 metros de altura y un foso lleno de agua.

El conjunto ejemplifica la arquitectura palacial tradicional de China y ha influido en el desarrollo cultural y arquitectónico de Asia oriental y otras partes del mundo.


Vista ciudad Prohibida en Pekin
Parte de la muralla de la ciudad prohibida en Pekin

La entrada a la Ciudad Prohibida se realiza desde la gran puerta que hay en la plaza de Tianammen  o la Puerta de la Paz Celestial.
El Patio Exterior fue usado para propósitos ceremoniales; el Patio Interior o Palacio Trasero alberga las secciones más al norte y fue la residencia del emperador y su familia, y el lugar de los asuntos diarios de estado. Una línea roja marca en el mapa de la derecha la división aproximada entre estas dos zonas.
En el centro del patio interior hay otro conjunto de tres salones, son el Palacio de la Pureza Celestial el Salón de la Unión y el Palacio de la Tranquilidad Terrenal. Más pequeños que los salones del Patio Exterior, fueron la residencia oficial del emperador y la emperatriz.

Patio interior ciudad Prohibida de Pekin

Edificio de Ciudad Prohibida en Pekin

Trono en ciudad Prohibida Pekin

Templos en ciudad Prohibida de Pekin

Si hay algo que remarca la vista de todo el conjunto arquitectónico, son las decoraciones de diferentes estatuas, cada una de ellas con un simbolismo, mayoritariamente de defensa. Entre las diferentes figuras se encuentran:
Guardianes del tejado, Leones chinos, Calzada Imperial talla con dragones, y numerosos puentes que nos unen unas estancias con otras. Además de todas estas decoraciones físicas, la ciudad también fue construida en Armonía numérica basada en los números impares, especialmente el nueve. La ciudad posee 9.999 estancias y las puertas de uso imperial están decoradas con 81 tachuelas (9x9).

En la ciudad prohibida estuvimos toda una mañana larga, es grandísima y la mayoría de los templos y estancias se pueden visitar por dentro. No pudimos entrar en todas porque al final ya nos cansamos de tantos templos y según pasábamos puertas y grandes patios no dejaban de aparecer…más templos y más templos… al final cansa un poco. Pero en definitiva la ciudad prohibida es fantástica, todas sus construcciones de todos los estilos chinos, clases y tamaños, sus altares de oro, plazas enormes, puentes muy bien decorados… todo el complejo es muy bonito e impresionante.

Ciudad Prohibida en Pekin

Ciudad Prohibida en Pekin

Ciudad Prohibida en Pekin

Otro de los templos que visitamos fue el Templo del Cielo, o Tian Tan, es uno de los mayores recintos sagrados de China. Construido durante el reinado de la dinastía Ming, era el lugar en el que el emperador realizaba sacrificios para dar las gracias al Cielo por los frutos obtenidos y rogaba por las futuras cosechas.
El templo se encuentra ubicado en un parque muy agradable por el que dimos un hermoso paseo. 


Templo del Cielo en Pekin

Si hay algo tradicional chino en la gran ciudad de Pekín, esos son los barrios chinos conocidos como hutong. Son en realidad callejones antiguos que componen el casco antiguo de las ciudades chinas. Construidos durante las dinastías Yuan, Ming y Qing, los hutongs de Pekín están repletos de viviendas ubicadas en torno a un patio cuadrado en las que los habitantes llevan una vida tradicional anclada en el pasado. 
La mayoría de las viviendas no disponen de cuarto de baño sólo existen baños comunitarios. En los hutongs los niños juegan alegremente mientras los mayores se dedican a sus tareas cotidianas, especialmente el comercio.

Paseando por los diferentes hutogns se puede ver a la gente en la calle en pijama y los niños que, en vez de llevar un pañal, llevan un pantalón con una abertura.

Hutongs barrios tradicionales en Pekin

Hutongs barrios tradicionales en Pekin

Hutong, barrio tradicional de noche en Pekin

Durante nuestra visita gran parte de esos barrios estaban siendo demolidos para dejar paso a nuevas zonas residenciales y comerciales. También este cambio a moderno tiene que ver que estábamos a una año de las Olimpiadas de Pekin 2008. Para nosotros esta visita fue muy importante ya que fue toda una oportunidad de visitarlos antes de que desaparezcan del todo. Los hutongs sin duda es lo que más me gustó de la ciudad porque es lo mas autentico, eran como ver trocitos de la China profunda en medio de modernas ciudades.

Una de nuestras visitas fuimos al Lago Houhai, literalmente "El Mar Negro", es una de las tres partes que componen Shichahai, una agradable zona compuesta por tres lagos que se ubica en el norte del centro de Beijing. Para llegar al parque fuimos en taxi. Se trata de una zona tranquila y rodeada de naturaleza, cuyos alrededores están repletos de bares y restaurantes que lo convierten en una de las zonas más animadas de la noche de Pekín. Después de pasear por el parque estuvimos sentados en una de sus terrazas tomando un refresco y disfrutando del maravilloso paisaje. El Lago Houhai es uno de los lugares más agradables de la ciudad y, al igual que algunos de los es un remanso de paz alejado del tráfico y las aglomeraciones del centro de Pekín.

Lago Houhai Pekin

También estuvimos paseando por toda la zona nueva de Pekín de grandes almacenes, calles peatonales y avenidas donde los precios pueden asemejarse a los occidentales. Por las calles de alrededor de estas calles comerciales peatonales, todavía se puede disfrutar de los mercadillos tradicionales chinos, más enfocados al turista donde hicimos algunas compras.


Zona  nueva de Pekin

Habíamos perdido a nuestro amigo David, el chico inglés en el transiberiano, ya que él viajaba en otro vagón y no nos dejaron ir a verle, pero por la más remota casualidad nos le encontramos en Pekín, comiendo en un McDonald’s. Nos vino genial su compañía, porque como él hablaba algo de chino, íbamos con él de lujo, podíamos pedir en los restaurantes lo que queríamos para comer y gracias a él pudimos sacar los billetes de tren a Xian,

Desde Pekin visitamos en un excursión La gran Muralla China.

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